
No obstante, las mujeres que han tenido fiebre durante un largo periodo o la gripe durante el embarazo no deberían preocuparse demasiado por estos resultados, ya que el riesgo detectado era extremadamente bajo.
Las infecciones leves no se asociaron con un aumento del riesgo de autismo, hallaron investigadores daneses. El consumo de antibióticos se asoció con un riesgo especulativo muy bajo, según el estudio publicado en línea el 12 de noviembre y en la edición impresa de diciembre de la revista Pediatrics.
"[Este] estudio es exclusivamente exploratorio y es muy pronto para sugerir ninguna implicación clínica" afirmó la líder del estudio, la Dra. Hjordis Osk Atladottir, del Instituto de Epidemiología y Medicina Social de la Universidad de Aarhus.
Añadió que "en realidad el estudio muestra que alrededor del 99 por ciento de las mujeres que contraen la gripe, que pasan por un proceso febril o toman antibióticos durante el embarazo no tienen hijos autistas".
Tener una infección hace reaccionar al sistema inmunológico del organismo, que desencadena una reacción con el objetivo de neutralizar el peligro.
Que el organismo se defienda es algo bueno, pero los estudios sugieren que la activación del sistema inmunológico de la madre puede dañar el desarrollo neurológico del feto.