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Los padres que se encuentran muy ocupados suelen comprar comida rápida o comida ya preparada, o bien galletas y golosinas que llaman la atención del niño con la completa facilidad de que los niños lo puedan comer sin ninguna ayuda. Pero esto puede correr el peligro de convertirse en la dieta diaria.
Hoy en día existen miles de recetas fáciles y rápidas para crear meriendas saludables y deliciosas para los niños, y de ésta forma se creará el hábito de comer bien.
Algunas meriendas saludables para mantener en casa pueden ser:
- Frutas secas.
- Pasas (para niños de más de 3 años) y frutos secos.
- Nueces (para niños de más de 4 años).
- Galletas y panecillos integrales.
- Jugos de frutas sin endulzar (100% jugos de frutas, no bebidas prefabricadas).
- Queso.
- Yogur.
- Salsa de manzana (sin endulzar).
- Cereales secos (elija los que tienen bajo contenido de azúcar).
- Galletas hechas en casa con ingredientes saludables como avena, nueces, uvas pasas y bajo contenido de grasa y azúcar.
- Mantener frutas cortadas en cuadros.
Si hay niños más grandes, se puede optar por preparar un pan integral con jamón de pavo y queso, un cóctel de frutas y otras meriendas.
El objetivo principal es que los niños aprendan a preferir las meriendas saludables y de esta forma evitar en ellos enfermedades a causa de la mala alimentación o que sean víctimas del sobrepeso y la obesidad. Y nosotros como padres de familia tendremos la tranquilidad y la satisfacción de que estamos ofreciendo lo mejor para nuestros hijos y también contribuimos a mejorar nuestra alimentación para darles un buen ejemplo.
