Fuente:cajasdsorpresas.blogspot.comEl dolor cervical es uno de los problemas más comunes que afecta prácticamente a casi toda la población adulta en algún que otro momento de sus vidas. Este puede ir acompañado de mareos y náuseas y puede implicar otras zonas como la escápula y el hombro.
El síntoma fundamental es un dolor que afecta principalmente la región del cuello pero también puede aparecer un zumbido en los oídos y se pueden sufrir problemas de visión y audición.
Las causas del dolor cervical casi siempre descansan en problemas mecánicos de las vértebras. Estos pueden estar provocados por movimientos bruscos, resfriados e incluso aparecen en personas que han estado sometidas a largos periodos de estrés.
A menudo también se presenta debido a una mala postura mantenida durante horas.
Por ejemplo, cuando se está demasiado tiempo de pie o cuando nos sentamos con la espalda arqueada. También es usual en las personas que conducen acercándose demasiado al volante y en quienes duermen boca abajo. Obviamente, todas estas son posturas que se deben evitar o se corre el riesgo de que el dolor en la cervical se convierta en un problema crónico.
En caso de dolor intenso, lo más recomendable es echar mano a los analgésicos pero debemos recordar que esta es tan solo una solución inmediata y no a largo plazo.
Si el dolor persiste, es importante acudir al médico.
Por otra parte, también se recomienda mantener una dieta rica en vitamina D (contenida en las anchoas, el salmón y el atún) así como ingerir alimentos que contengan ácidos grasos omega 6 y omega 3 (como las legumbres, huevos, pescado, soja, frutos secos y aceite de oliva). También se recomienda beber mucha agua mineral puesto que esta contiene un alto porcentaje de calcio.
Por otra parte, no olvides que existen ejercicios para aliviar el dolor cervical, son muy sencillos y puedes hacerlos en casa.
Por ejemplo, poniéndote de pie, inclina la cabeza hacia la derecha y hacia la izquierda, teniendo cuidado de hacer el ejercicio muy lentamente. Luego, levanta el brazo y mueve el otro hacia abajo, empuja hacia atrás y repite estos pasos.
Otro ejercicio consiste en mantener una mano en la cabeza, tirando de lado, primero a la derecha y luego a la izquierda, los hombros deben mantenerse en su lugar.